La Fireblade SP2, es el nombre que recibe la superbike que superará a la generación anterior de las CBR 1000 RR.

La firma de la ala dorada encara el año 2019 con la intención de recuperar el protagonismo perdido desde el año 2016 en Sepang, cuando fue la última vez que onda ganó una carrera del WSBK, en manos del fallecido piloto Nicky Hayden (2017).

Para ir en busca de su objetivo, ha confiado en la estructura de Moriwaki, quien lleva trabajando hace varios años con HRC en Japón, y serán quienes operen su nuevo equipo oficial en el WSBK.

La máquina será la Fireblade SP2, una motocicleta que cumpliría su tercera temporada desde que fue presentada en 2016, un modelo que ya suponía una evolución a la generación anterior de la CBR 1000 RR.

Cambios como la incorporación de un chasis más ligero; 15 kilos menos de peso, 11 cv más de potencia y electrónica moderna, no fueron suficientes para superar la expectativa hasta el momento, quedando claro que necesitan subir un peldaño más para ponerse a la altura de una competencia que año tras año se vuelve mucho más competitiva.

Desde Japón, los comentaristas de este mundo motor, comentan que Honda está preparando una bestial superbike de calle. A pesar de que, estéticamente, guardará algunas semejanzas con la línea actual de la Fireblade, se habla de una auténtica revolución dentro de Honda con una superbike que será mucho más cercana a la RC213V de MotoGP, una dinámica que actualmente ya siguen en Ducati (Panigale V4), Yamaha (YZF-R1M) y Aprilia (RSV4 RF).

La Fireblade 2020 incorporaría tecnología de distribución variable V-TEC al igual que algunas superbikes modernas como la S 1000 RR 2019 o la última generación de la GSX-R 1000 R. Respecto al motor, se comenta que Honda seguirá apostando por una disposición de cuatro cilindros en línea, mientras que otros apuntan a un cambio a una configuración V4, con 220 cv y una aerodinámica de MotoGP.

Honda ya tiene experiencia en trasladar parte de los componentes y parte ciclo de su RC213V de MotoGP a un modelo de calle. Lo hizo en 2015 con la exótica RC213V-S, una MotoGP que cualquier persona podría utilizar en carretera, solo debía tener una extensa cifra en su cuenta bancaria.

Honda tendría que adoptar una estrategia distinta para ofrecer un modelo mucho más accesible que no supere la barrera de los 20 millones de pesos (CHI), abriendo la puerta a una posible versión SP2 más cara y equipada, pensada para equipos de competición.

No nos queda más que esperar hasta el próximo EICMA para conocer esta supuesta bestial superbike de calle que está preparando Honda, esperemos que no sea un simple rumor.-


Reescrito por: Pedro Pereira Lara